viernes, 17 de abril de 2015

                                                                REENCARNACIÓN.



Supongo que todos conocemos el concepto de reencarnación, mediante el cual un ser vivo muere y vuelve a nacer con otro cuerpo. A simple vista una idea absurda, propia de una creencia religiosa o de un libro de ficción. Bien, pues tal vez, en cierta medida, sea una idea algo menos absurda de lo que puede parecer.

La clave está en nuestro ADN.



Una curiosidad que es indispensable para entender lo que trato de explicar, es que nuestro ADN está siendo alterado a cada segundo. Como ya sabemos, nuestro cuerpo hace copias de este constantemente, y a menudo comete fallos, pero para eso nuestro sistema dispone de su propio 'corrector ortográfico', por llamarlo de alguna forma. Los fallos detectados en la secuencia de ADN son corregidos, pero puesto que es difícil ser perfectos, existe un pequeño porcentaje de fallos que son pasados por alto.

Otro dato, es que en nuestro ADN se encuentra almacenada un montón de información por así decirlo inútil, a falta de un término más correcto, como lo es por ejemplo el código genético que nos hace tener cola. Obviamente nosotros los humanos no tenemos cola, y es que esta información está bloqueada, de forma que no se aplica a pesar de estar todavía en nosotros.

Pues aquí llega lo interesante. ¿Sabías que existe un cierto porcentaje de niños humanos que nacen con cola?
Obviamente les es amputada en caso de detectarla de pequeños, pero lo importante es el motivo de este suceso. Un fallo genético no corregido, pasado por alto, que provoca que esta información se desbloquee.


Errores genéticos como este son más comunes que otros, ya que el corrector se centra más en las partes más importantes.

¿Qué tiene que ver esto con la reencarnación? Bien, se ha demostrado que una información que se va almacenando en nuestro ADN es una especie de recopilación de nuestros recuerdos que es codificada en nuestro genoma y que es transmitido a nuestros sucesores.
Esto es algo de lo que varías compañías se han aprovechado ya para generar una buena trama, como es por ejemplo la saga de videojuegos Assassin's Creed, quienes lo explican bastante bien.
Esta información, conocida como memoria de ADN, está evidentemente bloqueada, pero imaginaos que, al igual que con la cola, un fallo genético desbloquea una sección de esta memoria, dándonos los recuerdos de nuestro padre, nuestra abuela, o algún antepasado lejano. Esto sería bastante parecido a la reencarnación, ¿no os parece? Al recuperar sus recuerdos, sería como si el individuo en cuestión volviera a la vida, siendo posible una recuperación de también su personalidad.

Dicho esto, la reencarnación es posible, aunque mucho más limitada de como se describe, siendo solo posible entre familia y con muy poca posibilidad de ocurrir, pero a fin de cuentas, posible.






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